Los niños son auténticas esponjas y absorben todo tipo de información y estímulos procedentes de su círculo más cercano. Por este motivo, es importante que empiecen a estudiar idiomas desde bien pequeños. De este modo, podrán asimilar conocimientos e información de una forma rápida y fácil. Es crucial darles la oportunidad de ser bilingües y de conocer otras culturas e idiomas. A continuación, hablaremos de las ventajas de estudiar idiomas desde pequeños.
Beneficios de estudiar idiomas desde pequeños
Numerosos estudios han demostrado que los niños tienen más facilidad para aprender idiomas que los adolescentes o adultos. Esto es debido a que sus redes neuronales se están desarrollando y retienen lo escuchado con una mayor facilidad. Además, tienen mucha más predisposición para conocer cosas nuevas y aprender.
Saber lenguas extranjeras proporciona numerosas ventajas competitivas en el trabajo y también ayuda a profundizar en una comprensión más completa del mundo. Esto enriquece la vida de una persona. Veamos algunos de los principales beneficios de que los niños aprenda idiomas.
Un aprendizaje eficiente, rápido y más natural
Se puede observar con facilidad que los niños aprenden más rápido que un adulto. Esto sucede porque su cerebro es más adaptable que el de los mayores. Los niños también suelen absorber conocimientos sin intención. Los más pequeños ni siquiera son conscientes de que están creciendo y aprendiendo nuevas lenguas.
Aprenden de una forma divertida y alternativa
Los pequeños de la casa no se sienten cohibidos ni tienen tanta vergüenza como los adultos. Para ellos, aprender idiomas es una experiencia divertida y se lanzan a hablar y cantar sin tapujos. No les importa fallar o no hacerlo del todo bien. Este punto es clave para aprender de una forma alternativa.
Mayor fluidez
Es mejor fomentar el aprendizaje temprano porque hace que los niños incorporen los nuevos idiomas en su día a día. Eso da más fluidez en el habla. Los niños no traducen las palabras desde su lengua al idioma aprendido. Simplemente, se dedican a aprender las palabras directamente.
La importancia de estudiar idiomas: Estimula la memoria
Estudiar las lenguas propicia un mejor desarrollo cognitivo y estimula la memoria. En los primeros años, se van aprendiendo palabras sueltas y la mente organiza listados en cada idioma. Es importante que los pequeños recuerden cómo se llama cada cosa y que aprendan a no mezclar idiomas.
Mayor capacidad para hacer varias tareas al mismo tiempo
Aporta una mayor capacidad de ejecutar varias tareas a la vez. El peque que ha aprendido distintos idiomas sabe cómo pensar en cada lengua y su mente se va adaptando a cambiar de un idioma a otro de una forma muy natural. Por este motivo, cuando ya se haya aprendido un segundo idioma, será más fácil aprender muchos más.
Se estimula la creatividad y el ingenio
Uno de los aspectos más sorprendentes de conocer múltiples idiomas desde la infancia es que estimula la creatividad a nivel lingüístico, literario y en el campo de la pintura o de la música. De hecho, se afirma que las personas bilingües sacan mejores resultados en los test cognitivos, que tienen como objetivo medir el pensamiento divergente. Hablar varios idiomas fomenta la flexibilidad, creatividad y originalidad.
Provoca una mejora en los resultados académicos
En el caso de los niños, es evidente que aprender idiomas va a repercutir en una mejora del rendimiento y desempeño en otras disciplinas de la escuela y ámbitos de importancia. Por lo tanto, formar y cultivar la mente de los niños hace que ellos se conviertan en mejores estudiantes en general. Es una forma de inculcarles disciplina y nuevas dinámicas de estudio que les servirán a la larga.
Se fomenta la tolerancia
Quienes empiezan a aprender idiomas extranjeros desde pequeños están mucho más preparados para el mundo actual. No se trata solo de que los niños puedan comunicarse con el resto de las personas globalmente, sino de algo más profundo. Las personas que deciden aprender otros idiomas son mucho más conscientes de la diversidad humana. Por eso, se convierten en personas más tolerantes con una mente más abierta.
Cada vez es más importante hablar un segundo y tercer idioma para hacerse hueco en un mundo muy competitivo y globalizado. Por ello, es recomendable empezar a prepararse cuanto antes. Los niños son verdaderas esponjas del aprendizaje, por lo que merece la pena que se pongan manos a la obra lo antes posible.
Más memoria, creatividad, comprensión, tolerancia… Estas son algunas de las ventajas y motivos que explican la importancia de estudiar idiomas de pequeños.
Es posible estudiar idiomas en la Villa de Griñón con la ayuda de profesores con experiencia. El objetivo es formar a los alumnos de una manera personalizada e integral. El colegio da una formación completa y de calidad para los pequeños de la casa, donde podrán aprender inglés, francés, alemán y chino.